La experiencia humana se compone de cuatro elementos, tres de estos son fenoménicos: Lo que pensamos, lo que sentimos (en el cuerpo) y lo que percibimos en el mundo a través de los sentidos, y luego, la conciencia (awareness), que es conciente de estas tres categorías fenoménicas.

No hay nada más que estos cuatro elementos en nuestra experiencia humana!

La conciencia y aquello que la conciencia percibe.

La conciencia es el trasfondo común de todas las percepciones, y lo que percibimos viene y va, siempre en movimiento.

Si aquello que buscamos, la felicidad que buscamos, no puede encontrarse en aquello que viene y va, en lo que se mueve, en lo que aparece y desaparece, solo queda una posibilidad, y es que esté en aquello que no cambia, aquello que no se mueve, nuestra realidad como conciencia, esa es la única posibilidad que queda.

Y las buenas noticias son que la felicidad existe, porque la hemos experimentado, aún si solo fuera de manera intermitente, solo como un destello por aquí, otro por allá.

Entonces, si usamos la razón, nuestra inteligencia: Por un lado existe, por el otro no puede ser encontrada en lo que vemos, escuchamos, tocamos, pensamos o sentimos, entonces debe encontrarse en la otra dirección: la conciencia.

No puedes ver la conciencia a través de la mente, como si fuera un objeto, puedes tener una representación de la conciencia.

La palabra conciencia ya es en si misma una representación, pero cualquier representación estará dada en términos de los sentidos, como una imagen, como un espejo, una pared blanca o negra, o lo que sea, pero aún será un objeto. Nunca será aquello que percibe los objetos, porque aquello que percibe los objetos no puede ser definido según los lineamientos de la mente.

La mente necesita abdicar, esto es importante de entender; o el entendimiento debe estar ahí, la mente no entiende nada, pero el entendimeinto debe estar ahí, que la mente no es un buen vehículo para llevarnos ahí. Esa es una mala noticias, pero la buena es que no necesitamos un vehículo, porque ya somos eso.